Cueros curtidos con Titanio 2da parte

Incusa ha desarrollado una amplia gama de cuero de titanio para una  variedad de usos finales y tiene clientes asociados en varios sectores del calzado y marroquinería incluyendo empresas de calzado como son Kickers, Gaston Mille y Fluchos y el líder estadounidense en el  negocio de guantes de beisbol Rawlings.

Silvino Navarro, Director de Incusa, cree que el titanio ofrece una opción fundamental para las curtiembres para minimizar el daño ambiental y ofrecer materiales sostenibles para diseñadores y consumidores. «Nosotros prevemos un largo y fructífero futuro para el titanio y para nuestra gama de cuero Sanotan», dijo Navarro.

Incusa también ha impresionado por el trabajo realizado en Asia sobre los beneficios en salud ofrecidos por el titanio. Ellos han llevado a cabo investigaciones con el Instituto Valenciano de Biomecanica (IVB), el cual indico que no hay posibilidad de irritación o alergia en la piel y que los consumidores encuentren titanio en el cuero curtido.

Partiendo de que este es un cuero más fuerte puede usarse con sustancias ligeras como el  cromo y así ofrecer mejor transpirabilidad. Como resultado, mientras el cuero de titanio trabaja perfectamente en casi todos los productos que se pueden hacer de cuero y ofrecer valor agregado  donde el cuero toca la piel tal como el calzado sin forro o las correas del reloj o donde los colores vibrantes son requeridos. Incusa ha logrado con éxito usar esto en el desarrollo de su mercado para la adición del titanio al cuero subrayando su creencia de que es un nuevo desarrollo fundamental y  una forma muy distinta de los demás sistemas de re curtido. La creación del proyecto TiLEATHER  con el soporte de Estados Unidos y la participación de un numero clave de socios indica que curtir con titanio actualmente está siendo tomada en serio por la industria.

¿Quién hace la investigación y el desarrollo actualmente?

Todo está apoyado en otra tendencia interesante que retorna de un desarrollo tecnológico, volver a la curtiduría la distancia un poco de las compañías químicas. Cuando el cromo fue el primero en ser introducido para curtir, fue necesario contratar personal que entendiera química básica y así poder manejar los cambios de pH involucrado para obtener los químicos que se absorbieran y su reacción según lo previsto. En ese tiempo la mayoría de conocimientos en curtir fueron llevados a cabo en las propias curtiembres. Poco a poco los tiempos  han cambiado y los técnicos en las curtiembres se han convertido cada vez más en controladores de procesos diseñados e introducidos por compañías químicas. Ciertamente las curtiembres han tenido que trabajar fuerte para asegurar estos procesos de escala en forma correcta y ser hechos a las especificaciones sobre una base constante, pero el centro de la tecnología real se traslado a lo largo del siglo XX hacia las compañías químicas.

Para que la industria del cuero sea realmente sostenible,esta necesita cambios. La rentabilidad en la industria química del cuero ha disminuido así que ellos tienen que servir a menor concentración y  a una industria más global y de cara a los nuevos competidores que emergen. Muchos de ellos investigan encontrando que han tenido que ser desviados a conformarse con problemas así como la legislación Europea conocida como REACH.  Un cambio de la propiedad de tecnología en cuero de vuelta a las curtiembres es muy necesario si la industria del cuero está en progreso.

El trabajo en Incusa y de uno o dos de los otros altos curtidores alrededor del mundo indican que este cambio puede estar comenzando a suceder y que un mejor balance entre las compañías químicas y las curtiembres se puede esperar como vemos para futuras innovaciones del cuero.

La participación de Incusa en Institutos de Investigación, como por ejemplo INESCOP, es también indicio de una tendencia hacia una mejor ciencia y menos anécdota. El negocio de la terminología en el cuero ha confundido al consumidor con palabras o términos como «orgánico», «biodegradable», «libre de metal», «libre de cromo», que se utilizan para promocionar este a los consumidores sin ninguna definición apropiada o integridad empresarial. Es muy difícil hacer cuero 100% libre de cromo como contaminante de muchas áreas, lo que significa que pequeñas cantidades de cromo casi siempre terminan en el producto terminado. Con frecuencia los curtidores utilizan colorantes que contienen cromo y demandan un estado libre de cromo. El estándar aceptado en Estados Unidos del nivel libre de cromo es 1000ppm pero los curtidores responsables como Incusa trabajan ahora con 100ppm.

De igual manera se  dice que el cuero es orgánico desde que este ha sido tratado con materiales vegetales, es claramente falso como una gran cantidad de materiales inorgánicos son utilizados en todas las etapas de pelambre hasta el acabado. Bien diseñados los curtidos vegetales hacen un cuero maravilloso y cuando se utilizan recursos sostenibles proporcionados para curtir el cuero pueden ser considerados una producción ambiental. Todavía curtidores y consumidores recuerdan que históricamente los curtidores vegetales han arrasado con nuestros bosques y manglares y que las grandes cantidades usadas para curtir han generado un mayor problema efluente, teniendo en cuenta los otros procesos de curtido.

Hay también una presunción de que cualquier cuero libre de cromo es naturalmente biodegradable. Esto se aleja de la verdad y tradicionalmente el cuero curtido en algunas circunstancias puede durar varios siglos. Montones de recortes de curtido vegetal en buen estado permanecieron en curtiembres abandonadas, en lugares como las montañas Adirondack en Estados Unidos, esto data de 1860 – 1880.

Una sustancia, componente, o  producto se ha llamado biodegradable  si este puede ser convertido por organismos vivos en los componentes básicos (por ejemplo en dióxido de carbono y agua). En Estados Unidos una sustancia puede ser considerada «Fácilmente Biodegradable» si más del 70% de la sustancia es convertida dentro de 28 días. La definición soportada en la regulación de estados Unidos es «el grado  al que la degradación en dióxido de carbono (CO2), agua y minerales tomen posición». Incusa ha iniciado investigaciones en la verdadera biodegradabilidad de cuero de titanio y los resultados iniciales han sido muy positivos lo que resulta realmente biodegradable.

Este tipo de estudio es importante como sostenibilidad verdadera de un producto relativo al ciclo total de vida y no solo que pasa en este abastecimiento y manufactura. Cuánto tiempo dura un producto y que sucede al final de su vida, es ahora una consideración importante. En todas estas áreas ahora aparece que el titanio ofreciendo la oportunidad más positiva para el cuero y el cuero usado en la industria para construir  la sostenibilidad de la materia prima.